Cómprame un café
Autores
Literatura de chantal maillard
la compasión difícil (libro)
Este es sin duda el libro más perturbador que ha escrito Chantal Maillard hasta la fecha. En él se enfrenta a los grandes temas sobre los que la humanidad lleva interrogándose
la razón estética (libro)
La conciencia colectiva de nuestras sociedades y su universo simbólico van siempre acompañados de unas determinadas categorías de la sensibilidad que varían de una época a otra
la compasión difícil (libro)
Este es sin duda el libro más perturbador que ha escrito Chantal Maillard hasta la fecha. En él se enfrenta a los grandes temas sobre los que la humanidad lleva interrogándose desde el principio de los tiempos. El nacimiento, el dolor y la muerte, los dioses y su ausencia, la relación de nuestra especie con los demás seres vivos, la maternidad y el suicidio, la culpa y la inocencia, el juicio y la creencia. Todo ello girando en torno al eje de una primordial violencia que todos padecemos a la vez que infligimos. ¿Cómo compadecer, considerando el crimen?, se pregunta la autora. ¿Y cómo no compadecer, considerando el hambre? Las tradiciones orientales y del mundo clásico griego están una vez más presentes en esta escritura que parece sin embargo surgir siempre del cuerpo, de la experiencia vivida en busca de una libertad imposible y de una clarividencia que despierta temor por lo que pueda llegar a comprender. «En todas las tiranías la inteligencia es la fruta prohibida», afirma Chantal. Y también «Con qué facilidad se traduce el miedo en conveniencia». Valor e inteligencia son necesarios para adentrarse en este libro, del que ninguna página le dejará indiferente.
subir
la razón estética (libro)
La conciencia colectiva de nuestras sociedades y su universo simbólico van siempre acompañados de unas determinadas categorías de la sensibilidad que varían de una época a otra y de las que derivan otras tantas maneras de entender el mundo. Si he aceptado el reto de una reedición de este libro después de veinte años es porque sigue pareciéndome importante que podamos percatarnos de estas variaciones –que son, por otra parte, indisociables de las fluctuaciones sociales– y de cómo estas van surgiendo al par que los valores que adoptamos. Una educación de la sensibilidad es, ahora más que nunca indispensable. La política no la hacen los partidos ni las agrupaciones, sino los individuos. Y si quienes gobiernan –formen éstos parte del demos o de aquellos que detentan el poder económico o el poder a secas– no han aprendido a conocerse, mal podrán gobernar. Para gobernar es preciso saber qué somos o qué estamos siendo más allá de nuestro personaje. Toda moral bien construida requiere de un fundamento extra-moral y este tiene que ver con el conocimiento de uno mismo, algo que tan sólo puede iniciarse con la observación de la propia mente. *La razón estética* es sin duda una propuesta para tiempos difíciles. Que sea viable o no dependerá del interés que pongamos en que esta educación se lleve a cabo.
subir