Jacob es un demiel (un medio-ángel, medio-humano) que debe cumplir siete años de servicio hasta decidir si servirá en las filas del bien o del mal. Viviremos el sufrimiento de Jacob, el protagonista, y veremos reflejados en él nuestros propios interrogantes frente a la adversidad. Jacob se ve implicado en una batalla dialéctica entre Dios (Josôc) y Satanás (Ôyeb) teniendo que asumir las desgracias que le suceden. Frente a los trágicos acontecimientos, Jacob se plantea si merece la pena seguir a un Dios impredecible y, en ocasiones, incomprensible. Preso en sus sentimientos por Raquel, deberá elegir bando y asumir sus consecuencias. ¿Hasta dónde será capaz de llegar por amor?

En esta obra de ficción, donde se ha inventado una angelología paralela, Jacob es un demiel (un medio-ángel, medio-humano) que debe cumplir siete años de servicio hasta decidir si servirá en las filas del bien o del mal. Nos creemos el ombligo del mundo, el centro de todos los acontecimientos, los únicos autores de lo que sucede a nuestro alrededor, pero ¿y si hay una realidad que no percibimos? ¿Cómo interactuamos con lo que no vemos? En esta primera novela, el mundo de la protagonista es sacudido por uno de estos seres y no le será fácil asimilar la naturaleza angélica del hombre del cual se ha enamorado. ¿Es conveniente rendirse a la locura por amor?