Literatura de diana al azem
cardamomo (libro)
Sam Lawson es hijo de una pareja de famosos cirujanos plásticos. Sus padres han diseñado para él una carrera prometedora en la clínica familiar. Sin embargo, un incidente hace
el algoritmo del amor (libro)
Subtitulado: ¿Sabrías calcular su resultado? Raquel es una mujer joven que no ha tenido demasiada suerte en el amor. Sus anteriores relaciones no le han durado demasiado y ha p
evadne y el valle de las gorgonas (libro)
No había más tiempo que perder. Llené de aire mis pulmones, cerré los ojos y eché a correr. Mis pies dejaron de sentir la solidez del suelo para flotar en un mar de ausencia. N
evadne, la sirena perdida (libro)
Nunca olvidaré la sensación de ahogo que me produjo estar tanto tiempo bajo el agua. La falta de oxígeno bloqueó mis pulmones provocando pequeños espasmos en mi cuerpo, y la po
cardamomo (libro)
Sam Lawson es hijo de una pareja de famosos cirujanos plásticos. Sus padres han diseñado para él una carrera prometedora en la clínica familiar. Sin embargo, un incidente hace que se replantee la medicina y decide trasladarse a Siria como voluntario. En Damasco descubre no solo las consecuencias terribles de la guerra. El azar y la curiosidad lo llevan hasta la tienda de especias de Nour, una joven que lucha por sacar adelante a su familia y que le descubre los matices y secretos del cardamomo. Ese encuentro inesperado supone para ellos un nuevo comienzo, una nueva ilusión en medio del caos. Diana Al Azem recorre Damasco a través de los recuerdos familiares, una ciudad ahora desolada que en otro tiempo fue un lugar hermoso, lleno de luz, y construye gracias a un estilo lleno de resonancias una historia bella y cruel, la prueba de que a pesar de la vanidad de los hombres, del odio entre fronteras, del dolor y de la huida, siempre hay un sitio para la esperanza. Una historia de amor puro, un homenaje a los miles de refugiados que luchan cada día por sobrevivir.
el algoritmo del amor (libro)
Subtitulado: ¿Sabrías calcular su resultado? Raquel es una mujer joven que no ha tenido demasiada suerte en el amor. Sus anteriores relaciones no le han durado demasiado y ha perdido la ilusión por encontrar a un hombre que la haga feliz. Este año, en su nuevo trabajo, Raquel conocerá a un chico siete años menor que ella, un chaval adorado por muchas y deseado por otras tantas. Raquel comenzará a sentir ciertos sentimientos por el joven que le harán dudar sobre su posición en el trabajo, pues si esa relación saliera a la luz, la muchacha podría perder su empleo. El problema es que el joven tiene muy claro sus deseos hacia ella y será muy persuasivo. ¿Será Raquel capaz de resolver este problema? ¿Podrá descifrar la verdadera solución del amor? Esta es una nueva versión readaptada y ampliada de la anterior obra de la autora, 'Escondidos entre aulas'
evadne y el valle de las gorgonas (libro)
No había más tiempo que perder. Llené de aire mis pulmones, cerré los ojos y eché a correr. Mis pies dejaron de sentir la solidez del suelo para flotar en un mar de ausencia. Nada, no había nada que sujetara mis extremidades ni rozara mi cuerpo. Solo aire. El Dios Eolo me regaló durante unos segundos una pizca de la más absoluta y fascinante armonía. El viento acariciaba mi rostro y abrazaba mi cuerpo como una nube de algodón. De pronto, todos mis sentidos se revelaron de forma impulsiva; mis oídos, mi piel, mi olfato, mi vista y mi tacto despertaron como el amanecer de un nuevo día. Cada partícula sostenida en el aire, cada gota sumergida en el agua, cada brizna de polvo tendida sobre las rocas… era captada por mis cinco sentidos. Lejos de sentirme amenazada por una caída mortal, mi corazón gritaba dichoso por un nuevo comienzo, una nueva identidad. Como bien dijo el Señor Fisher antes de nuestra partida, hay un tiempo para nacer y un tiempo para morir. Este era, sin duda, el momento de mi resurrección'
evadne, la sirena perdida (libro)
Nunca olvidaré la sensación de ahogo que me produjo estar tanto tiempo bajo el agua. La falta de oxígeno bloqueó mis pulmones provocando pequeños espasmos en mi cuerpo, y la poca luz que penetraba bajo el mar se fue apagando poco a poco. Medio inconsciente sentí que algo agarraba mi cintura para arrastrarme a las profundidades del océano, y fue entonces cuando perdí el conocimiento por completo. No recuerdo cómo ni cuándo conseguí salir a flote, pero en algún momento del atardecer me hallé a la deriva sobre una tabla de surf, a unos quinientos metros de la costa de Tarifa. Gracias a una patrulla de guardacostas que supervisaba la zona, pude volver a casa. Jamás encontraron una explicación al hecho de que una niña de tres años sobreviviera en mitad del mar bajo aquellas temperaturas invernales.