Hector O'Brien Moore no ha visitado Irlanda desde que era un niño, pero cuando regresa a su propiedad ancestral en el oeste de Irlanda, encuentra el lugar curiosamente desierto, excepto por un sirviente borracho y un cadáver. La mujer fallecida, la periodista inglesa Joan Allison, había sido amiga del primo casado de Héctor, Dominick, cuyos dos hijos desaprobaban la ruptura entre sus padres. Los primos y los campesinos curiosos confunden el problema, pero afortunadamente el superintendente Duffy está disponible para descubrir vínculos entre eventos aparentemente no relacionados.

Los O’Corram habían tenido que vender el castillo de Torcleeve, pero en el pueblo junto al lago, donde todavía poseían propiedades, su nombre gozaba de un respeto casi feudal. Después de la muerte de su madre, el heredero, John, regresó allí, buscando paz y posiblemente también la compañía de una joven que había conocido antes de su matrimonio.El regreso de John pareció actuar como un catalizador para los habitantes del pacífico pueblo irlandés de Torcleeve, entre las consecuencias está un asesinato en circunstancias extrañas y desconcertantes.El superintendente Duffy viene a investigar, sobre él recae la onerosa tarea de separar los hechos de la ficción, de los cuales abundan en Torcleeve.Nigel Gerald escribe con su singular humor y descubre en la escena irlandesa acontecimientos que son a su vez exóticos, cómicos, gruñones y emocionantes. El descubrimiento de la identidad del asesino será una sorpresa y la narrativa que conduce a él es continuamente apasionante.