Michel Reylan, un médico psicoanalista con clientela millonaria, recibe la visita de un desconocido que le exige el pago de cien mil dólares mensuales, bajo la amenaza de inducirle a matar a su amada esposa. Aterrado, contrata los servicios de Roy Cadger, afamado investigador privado, quien se convierte en el protagonista de la novela, descubriendo entre un grupo de invitados a la residencia de Reylan, todos de la alta sociedad, al verdadero inductor de este chantaje. AUDAX, bajo su habitual apariencia de Lord King, acompañado de 'Baby', es un invitado más del doctor y en éste caso, mero espectador del drama.

Última entrega dela serie donde el personaje se despide de la escena narrativa y donde sea anuncia una nueva serie policiaca que nunca vio la luz. Ike Slavey, un judío que utiliza su negocio de antiguedades como tapadera de sus actividades delictivas, planifica y financia la fuga de tres reclusos que necesita para sus planes. Comienzan a perpetrar una serie de asaltos a joyerías, robos y asesinatos, dejando en todos ellos la firma de AUDAX. Roy Cadger, el investigador privado que estuvo a punto de descubrir la verdadera personalidad de AUDAX, en la aventura titulada «Alta Sociedad», inculpa a Lord King de estos delitos, pero colabora con él para la captura de los bandidos. Cadger, ofrece a AUDAX la posibilidad de que emigre a Australia y propone a «Baby», «Grumpy» y Lefty Longleg, una asociación dedicada a la investigación criminal. El grupo se llamaría Los cuatro ases, será el título de una de las primera entregas de Servicio Secreto.

Otra muestra más de la genialidad de Pedro Víctor Debrigode Dugi (en este caso bajo el seudónimo de P. V. Debrigode), que fue publicada por Ediciones Lux aproximadamente en 1948. La colección propiamente dicha consta de 10 novelas en formato de 19 x 13 y a doble columna (según usos de la época) y con ilustraciones de Eugenio Giner (creo). No obstante, de este personaje (Ross Maloney) aparecieron un total de diecisiete novelas (que sepamos). Pues además de las diez aparecidas en esta colección, se habían publicado años antes –en 1944– otras seis dentro de la colección Superhombres, siendo Ross Maloney inseparable compañero de Red Colt, 'El ametrallador' –números 1, 4, 6, 8, 10 y 14 de la colección Superhombres–. Y posteriormente, en noviembre de 1952, dentro de la colección Servicio Secreto, apareció el nº 123, “Tres en el infierno”, en la que uno de los tres es Ross Maloney, al del que se hace referencia en alguna ocasión a su sobrenombre de 'Capitán Pantera', esta vez como espía norteamericano en plena segunda guerra mundial con una misión que cumplir en Holanda.

Cinco endemoniados, Guante blanco, 2, Ediciones L.E.S.T.E.R., Barcelona, 1944 Soberbia novela detectivesca de clara influencia anglosajona que nos presenta personajes encerrados en un caserón perdido en Escocia, un crimen, secretos inconfesables, una investigación y una brillante resolución. En el corazón de África, Big Joe -Joseph Curry- es un miserable sin escrúpulos que ejerce de cruel capataz frente a sus trabajadores nativos; al llegar un hombre blanco malherido y cargado de diamantes no duda en asesinarlo y en huir quemando vivos a todos sus trabajadores, encerrados bajo llave en un barracón Años después, los sobrinos de Big Joe reciben una extraña invitación; mil libras y un billete para visitar al tío que marchó de Gran Bretaña por motivos oscuros -un desfalco-, cuando ellos aún no habían nacido. Los sobrinos son los hermanos Ketty y Frank Jones, hijos del importante banquero Robert Jones, y la humilde Beryl Curry, una muy bella mecanógrafa, hija de Arnold Curry y de Joan, una antigua novia de Big Joe; los tres deciden, a escondidas de sus padres, aceptar la extraña posibilidad de conocer a un tío al que nunca han visto y del que sólo han oído hablar mal. Ya en el caserón son atendidos por el mayordomo, James Faraway y tienen la oportunidad de conocer a Joseph Curry, un resentido que les ofrece una juego terrible; sabedor de que tiene enfermedad incurable, nombrará su heredero a quien se atreva a asesinarlo. Estupefactos ante la propuesta reciben la aparentemente casual visita de Fergus Simpson, un desgarbado cameraman que está trabajando para diversas productoras cinematográficas y que pide permiso para filmar escenas de la casa; poco después se oyen unos disparos y se descubre el cuerpo sin vida de Faraway. Pero no es Faraway el finado, en realidad es Big Joe que, aprovechando que sus sobrinos no le conocían, había propuesto a su mayordomo un cambio de papeles para montar la mascarada. A partir de ese momento se empiezan a desvelar cosas sorprendentes, como que Fergus Simpson era el hijo del explorador que fue asesinado por Big Joe y que había llegado para vengar a su padre. La policía -el inspector Roney y su incompetente ayudante Yardley- se encuentra desbordada ante algunos elementos inexplicables del crimen hasta que Simpson y Ketty huyen; su acción apunta a su culpabilidad pero en realidad ellos lo hacen para encubrir al padre de ella -Arnold Curry- que, a escondidas, vino a la mansión temeroso de que su hermano quisiese abusar de Ketty. En Londres, escondidos y disfrazados, los prófugos llevan a cabo una investigación que les lleva descubrir que el verdadero asesino es en realidad Robert Jones que, arruinado por sus tratos con una corista, se confabuló con su hija Ketty; él se presento también en el caserón y cometió el crimen, Ketty sedujo a Faraway para encubrir el crimen y luego lo asesinó. La investigación es llevada a cabo por Fergus simpson que ha conseguido la complicidad del inspector Roney quien, agradecido, decide incorporar a la policía al sagaz Fergus; éste consigue a su vez, el amor de Beryl, sorprendente heredera de una parte de la fortuna de su tío. La novela es excelente de principio a fin, creando personajes de notable complejidad y urdiendo el autor una compleja trama que sabe plantear, complicar y resolver con maestría. Las influencias de Agatha Christie parecen claras pero en determinados aspectos -tal como está planteado el caso, los escenarios, la presencia de personajes perseguidos por crímenes cometidos en territorios del Imperio- nos hacen evocar los relatos y novelas de Conan Doyle y de Wilkie Collins. El aire british está conseguido con maestría creando Debrigode una ambientación verosímil y natural, en absoluto forzada, y a lo largo de la narración el autor demuestra un conocimiento de los matices legales que evidencian su formación en el campo del derecho.

Los asiduos concurrentes del hipódromo de Brink, situado en la margen derecha del gran lago Michigan, prestan poca atención a los personajes exóticos y extravagantes que, más que en ninguna otra ciudad norteamericana, pululan por Chicago. Sin embargo, aquel raro individuo llamaba la atención… Completamente vestido de gris, desde los zapatos de ante hasta su sombrero hongo, era una sinfonía en gris. Destacaba en aquel conjunto la nota negra de una barbita cuadrada, afeitada en los maxilares en forma de media luna y que se reunía en trazo continuo con el sedeño bigote. El rostro, curiosamente arcaico, era inquietante por la dura expresión de unos ojos rasgados, oblicuos… Absolutamente indiferente a la curiosidad que despertaba su presencia, el hombre de gris se acercó a la taquilla de boletos y del bolsillo interior de su americana extrajo una cartera de ante gris. La vació totalmente sobre el pulido cristal de la taquilla, formando un montoncito de billetes.

Colección corta de Pedro Victor Debrigode, publicada por Bruguera, en el 1946, cuyo personaje principal Lord King, un joven elegante y distinguido, experto coleccionista de antiguedades, con fama de intelectual apocado y poco amante de la violencia, habita en el piso 23 del Cornell Building de Nueva York, junto con su ama de llaves Grumpy y la sobrina de ésta, de figura encantadora y curvas de mareo, «Baby» una mecanógrafa secretaria. Nuestro personaje, ladrón de guante blanco, actúa contra el mundo del hampa, bajo el apelativo de «Audax», nombre de guerra adoptado en su primera aventura. Conduce un roadster «Auburn», viste de smoking y cubre su rostro con una blanca bufanda de seda y un antifaz y es un maestro en el uso de sus elegantes bastones que maneja como floretes. La propaganda de la editorial decía: «El hombre de hierro, el incógnito gángster que impone su voluntad en Nueva York y desconcierta a la policía con su audacia inverosímil». En su primera aventura, «AUDAX», descubre la personalidad de un vengador que asesina a sus víctimas mientras silba la composición fúnebre de Saint-Saens, «La Danza Macabra». Conocido por la policía como «El Silbador», Audrey Rowney, busca a los asesinos de su padre, quienes se apoderaron de sus negocios y su fortuna, dejándoles a su madre y a él, en la indigencia. Consigue su venganza, pero cae en lucha con un agente federal, Fergus Clay, venido de Chicago para detenerle.

Otra muestra más de la genialidad de Pedro Víctor Debrigode Dugi (en este caso bajo el seudónimo de P. V. Debrigode), que fue publicada por Ediciones Lux aproximadamente en 1948. La colección propiamente dicha consta de 10 novelas en formato de 19 x 13 y a doble columna (según usos de la época) y con ilustraciones de Eugenio Giner (creo). No obstante, de este personaje (Ross Maloney) aparecieron un total de diecisiete novelas (que sepamos). Pues además de las diez aparecidas en esta colección, se habían publicado años antes –en 1944– otras seis dentro de la colección Superhombres, siendo Ross Maloney inseparable compañero de Red Colt, 'El ametrallador' –números 1, 4, 6, 8, 10 y 14 de la colección Superhombres–. Y posteriormente, en noviembre de 1952, dentro de la colección Servicio Secreto, apareció el nº 123, “Tres en el infierno”, en la que uno de los tres es Ross Maloney, al del que se hace referencia en alguna ocasión a su sobrenombre de 'Capitán Pantera', esta vez como espía norteamericano en plena segunda guerra mundial con una misión que cumplir en Holanda.

Otra muestra más de la genialidad de Pedro Víctor Debrigode Dugi (en este caso bajo el seudónimo de P. V. Debrigode), que fue publicada por Ediciones Lux aproximadamente en 1948. La colección propiamente dicha consta de 10 novelas en formato de 19 x 13 y a doble columna (según usos de la época) y con ilustraciones de Eugenio Giner (creo). No obstante, de este personaje (Ross Maloney) aparecieron un total de diecisiete novelas (que sepamos). Pues además de las diez aparecidas en esta colección, se habían publicado años antes –en 1944– otras seis dentro de la colección Superhombres, siendo Ross Maloney inseparable compañero de Red Colt, 'El ametrallador' –números 1,4,6,8,10 y 14 de la colección Superhombres–. Y posteriormente, en noviembre de 1952, dentro de la colección Servicio Secreto, apareció el nº 123, “Tres en el infierno”, en la que uno de los tres es Ross Maloney, al del que se hace referencia en alguna ocasión a su sobrenombre de 'Capitán Pantera', esta vez como espía norteamericano en plena segunda guerra mundial con una misión que cumplir en Holanda.

Gus Peeper, reportero del Herald de Nueva York, había iniciado con un vibrante artículo una investigación sobre unos pistoleros que, tras asesinar a un cobrador de banco para robar su dinero, se enfrentaron a una patrulla de policías, matando a seis de sus agentes. Posteriormente el periódico encarga a Gus la reseña de un combate de lucha libre en el Catch Palace, entre Lefty Longleg y Chic Drumond, hermano de uno de los pistoleros. Por suerte o por desgracia Gus entabla conversación con Baby, que asiste a la velada y que le anima a conseguir una entrevista en los vestuarios. Allí escucha balbucear al luchador vencido unas palabras que le relacionan con los pistoleros de su artículo. Se lo comenta a Baby y la secretaria “torbellino” le arrastra a una serie de aventuras que finalizan desbaratando los siniestros planes del nuevo jefe de los pistoleros, un japonés, Hirazi Tamura, que planeaba secuestros de hijos de millonarios.

Lord King, gran aficionado al deporte de las doce cuerdas, sospecha del rápido desenlace de un combate entre Champ O'Shea y Kid Ray, descubriendo que Angus Barryth, su amigo el promotor de boxeo, es objeto de chantaje a manos de un misterioso enmascarado, para amañar los combates de Champ. Ayudado por su linda secretaria 'Baby', AUDAX desbarata los planes del enmascarado, que resulta ser un antiguo delincuente camuflado en el servicio doméstico de Angus.

El visitante, de rostro campechano, larguirucho y desgarbado, aparentaba unos cuarenta años y vestía cómodamente un holgado traje de dril blanco, y sobre sus huesudas rodillas había colocado su casco de corcho, que el agregado, Kit Perkins, justipreció como producto valorado en veinte dolares y vendido recientemente por los 'Universales' al bazar hindú del puerto. —He llegado hace cuatro horas, señor agregado. Necesito marcharme en el mismo barco cuando zarpe dentro de cinco días. No me divertiría el perderlo… porque este horno debe ser algo monótono y privado de distracciones. —La Martinica es ideal en julio. Llueve mucho y, colocándose desnudo en la verandah, se respira bastante pasablemente. Pero le aconsejo, en cuenta a que estamos en pleno mes de calor, que por todos los medios procure no dejarse escapar el 'cargo' correo. Pasa sólo una vez por mes. ¿Algún asunto comercial es al que debo el placer de su visita? ¿Representaciones, exportaciones? —Necesito adquirir y llevarme diez 'gloonas'.

Ned Sparkle, el periodista redactor de la “Agencia Universal”, tenía como tarea la de hojear la prensa mundial, y a medida que iba leyendo, armado de un descomunal lápiz rojo, trazaba una enérgica cruz al costado del artículo periodístico que le había llamado la atención y que consideraba digno de figurar en la revista semanal que, saliendo de las linotipias de la “Universal”, compendiaba las noticias mundiales cuya principal característica era la sensación.

Otra muestra más de la genialidad de Pedro Víctor Debrigode Dugi (en este caso bajo el seudónimo de P. V. Debrigode), que fue publicada por Ediciones Lux aproximadamente en 1948. La colección propiamente dicha consta de 10 novelas en formato de 19 x 13 y a doble columna (según usos de la época) y con ilustraciones de Eugenio Giner (creo). No obstante, de este personaje (Ross Maloney) aparecieron un total de diecisiete novelas (que sepamos). Pues además de las diez aparecidas en esta colección, se habían publicado años antes –en 1944– otras seis dentro de la colección Superhombres, siendo Ross Maloney inseparable compañero de Red Colt, 'El ametrallador' –números 1,4,6,8,10 y 14 de la colección Superhombres–. Y posteriormente, en noviembre de 1952, dentro de la colección Servicio Secreto, apareció el nº 123, “Tres en el infierno”, en la que uno de los tres es Ross Maloney, al del que se hace referencia en alguna ocasión a su sobrenombre de 'Capitán Pantera', esta vez como espía norteamericano en plena segunda guerra mundial con una misión que cumplir en Holanda.

Otra muestra más de la genialidad de Pedro Víctor Debrigode Dugi (en este caso bajo el seudónimo de P. V. Debrigode), que fue publicada por Ediciones Lux aproximadamente en 1948. La colección propiamente dicha consta de 10 novelas en formato de 19 x 13 y a doble columna (según usos de la época) y con ilustraciones de Eugenio Giner (creo). No obstante, de este personaje (Ross Maloney) aparecieron un total de diecisiete novelas (que sepamos). Pues además de las diez aparecidas en esta colección, se habían publicado años antes –en 1944– otras seis dentro de la colección Superhombres, siendo Ross Maloney inseparable compañero de Red Colt, 'El ametrallador' –números 1,4,6,8,10 y 14 de la colección Superhombres–. Y posteriormente, en noviembre de 1952, dentro de la colección Servicio Secreto, apareció el nº 123, “Tres en el infierno”, en la que uno de los tres es Ross Maloney, al del que se hace referencia en alguna ocasión a su sobrenombre de 'Capitán Pantera', esta vez como espía norteamericano en plena segunda guerra mundial con una misión que cumplir en Holanda.

Otra muestra más de la genialidad de Pedro Víctor Debrigode Dugi (en este caso bajo el seudónimo de P. V. Debrigode), que fue publicada por Ediciones Lux aproximadamente en 1948. La colección propiamente dicha consta de 10 novelas en formato de 19 x 13 y a doble columna (según usos de la época) y con ilustraciones de Eugenio Giner (creo). No obstante, de este personaje (Ross Maloney) aparecieron un total de diecisiete novelas (que sepamos). Pues además de las diez aparecidas en esta colección, se habían publicado años antes –en 1944– otras seis dentro de la colección Superhombres, siendo Ross Maloney inseparable compañero de Red Colt, 'El ametrallador' –números 1,4,6,8,10 y 14 de la colección Superhombres–. Y posteriormente, en noviembre de 1952, dentro de la colección Servicio Secreto, apareció el nº 123, “Tres en el infierno”, en la que uno de los tres es Ross Maloney, al del que se hace referencia en alguna ocasión a su sobrenombre de 'Capitán Pantera', esta vez como espía norteamericano en plena segunda guerra mundial con una misión que cumplir en Holanda.

Otra muestra más de la genialidad de Pedro Víctor Debrigode Dugi (en este caso bajo el seudónimo de P. V. Debrigode), que fue publicada por Ediciones Lux aproximadamente en 1948. La colección propiamente dicha consta de 10 novelas en formato de 19 x 13 y a doble columna (según usos de la época) y con ilustraciones de Eugenio Giner (creo). No obstante, de este personaje (Ross Maloney) aparecieron un total de diecisiete novelas (que sepamos). Pues además de las diez aparecidas en esta colección, se habían publicado años antes –en 1944– otras seis dentro de la colección Superhombres, siendo Ross Maloney inseparable compañero de Red Colt, 'El ametrallador' –números 1,4,6,8,10 y 14 de la colección Superhombres–. Y posteriormente, en noviembre de 1952, dentro de la colección Servicio Secreto, apareció el nº 123, “Tres en el infierno”, en la que uno de los tres es Ross Maloney, al del que se hace referencia en alguna ocasión a su sobrenombre de 'Capitán Pantera', esta vez como espía norteamericano en plena segunda guerra mundial con una misión que cumplir en Holanda.

Gloria Hyden se desperezó echando los brazos hacia atrás hasta oír crujir sus hombros. ¡Se estaba tan bien así, a la sombra, sin moverse, sin pensar en nada! Y, según Rupert Bryce, era ésta la mejor medicina para Gloria Hyden: 'relajar nervios y cerebro'. El sanatorio del doctor Bryce se intitulaba: 'Clínica de reposo', y Rupert Bryce hacia todo lo posible para que sus clientes olvidaran que había conquistado el número uno en los exámenes de psiquiatría. Pero Gloria Hyden poseía un temperamento poco amante de las ambigüedades y los eufemismos. Y aunque desde hacía una semana soportaba en silencio las diplomáticas atenciones del doctor Bryce, había hoy decidido poner los puntos sobre las 'íes'. Aguardaba en aquel sombreado rincón del vasto jardín, porque sabía que Rupert Bryce no tardaría en llegar para su propia 'cura de reposo, porque yo soy un médico que predica con el ejemplo'. Y cuando el atildado y guapo doctor entró en la sombreada rotonda, Gloria Hyden le guiñó amistosamente.

Otra muestra más de la genialidad de Pedro Víctor Debrigode Dugi (en este caso bajo el seudónimo de P. V. Debrigode), que fue publicada por Ediciones Lux aproximadamente en 1948. La colección propiamente dicha consta de 10 novelas en formato de 19 x 13 y a doble columna (según usos de la época) y con ilustraciones de Eugenio Giner (creo). No obstante, de este personaje (Ross Maloney) aparecieron un total de diecisiete novelas (que sepamos). Pues además de las diez aparecidas en esta colección, se habían publicado años antes –en 1944– otras seis dentro de la colección Superhombres, siendo Ross Maloney inseparable compañero de Red Colt, 'El ametrallador' –números 1,4,6,8,10 y 14 de la colección Superhombres–. Y posteriormente, en noviembre de 1952, dentro de la colección Servicio Secreto, apareció el nº 123, “Tres en el infierno”, en la que uno de los tres es Ross Maloney, al del que se hace referencia en alguna ocasión a su sobrenombre de 'Capitán Pantera', esta vez como espía norteamericano en plena segunda guerra mundial con una misión que cumplir en Holanda.

Mirko Blaharoff, un traficante de armas, un contrabandista sin escrúpulos, intenta conseguir toda la producción de armamento de dos factorias, rivales desde su fundación, la «Phoenix», de Horace Wilson y la «Steel & Cº», de Cornelius Van Bloke, sin pagar un dólar, para lo cual contrata los servicios de un asesino a sueldo, Jim Biggard, quien consigue liquidar a tres agentes de contraespionaje que obstaculizaban la operación. Lord King, invitado por la esposa de Van Bloke para valorar una compra de joyas, logra, como AUDAX, abortar la salida de armamento, volando los cargueros de Blaharoff y eliminando a Biggard y sus pistoleros.

Dave Bross, el agente secreto, estaba de un humor pésimo, cosa que no solía sucederle con frecuencia. Pero en aquella noche, y dada la situación, estaba justificada su actitud. En los últimos quince días se habían sucedido los ataques terroristas contra los principales núcleos defensivos de la nación. Y los atentados habían adquirido tal violencia que la prensa no había exagerado al calificarlos en conjunto como “la ola destructora”.

La calle 82 era en la populosa ciudad de Chicago la arteria urbana más concurrida de noche. Organizada sistemáticamente al servicio de los noctámbulos y provincianos, alternaba los cabarets, teatros alegres y salones de danza. Una profusión de carteles luminosos combatían silenciosamente, disparándose sus luces multicolores, anunciando los respectivos espectáculos y diversiones que representaban. Los locales autorizados por la ley tenían su sede en los bajos de los rascacielos, y en muchos pisos altos, dispuestas con ingeniosos camuflajes, estaban instaladas las salas de juego clandestinas. Una pareja de bailarines, dibujada expertamente por hileras de bombillas, se movía caprichosamente, obedeciendo al cambió continuo de la corriente que circulaba por el circuito eléctrico del cartel luminoso.

Lefty Longleg estimó que el puntapié que acababa de recibir en la boca del estómago, en pleno plexo solar, rebasaba los límites de la discreción. Doblóse hacia adelante, intentando una presa en la sudorosa cintura de su contrincante, que, como un émbolo loco, le aplicó un rápido 'uno-dos' en la mandíbula con la cara interna de los antebrazos. Los estentóreos silbidos del público, que se había convertido espontáneamente en una improvisada masa coral ululante, fueron menguando… —Menos calor, Bar —bisbiseó Longleg, aprovechando la cercanía del oído de su adversario. Pero Barney Burns, 'El Apolo de Los Angeles', desentendióse del prudente aviso. No estaba acostumbrado a que le abuchearan y quería congraciarse con sus incondicionales.

Otra muestra más de la genialidad de Pedro Víctor Debrigode Dugi (en este caso bajo el seudónimo de P. V. Debrigode), que fue publicada por Ediciones Lux aproximadamente en 1948. La colección propiamente dicha consta de 10 novelas en formato de 19 x 13 y a doble columna (según usos de la época) y con ilustraciones de Eugenio Giner (creo). No obstante, de este personaje (Ross Maloney) aparecieron un total de diecisiete novelas (que sepamos). Pues además de las diez aparecidas en esta colección, se habían publicado años antes –en 1944– otras seis dentro de la colección Superhombres, siendo Ross Maloney inseparable compañero de Red Colt, 'El ametrallador' –números 1,4,6,8,10 y 14 de la colección Superhombres–. Y posteriormente, en noviembre de 1952, dentro de la colección Servicio Secreto, apareció el nº 123, “Tres en el infierno”, en la que uno de los tres es Ross Maloney, al del que se hace referencia en alguna ocasión a su sobrenombre de 'Capitán Pantera', esta vez como espía norteamericano en plena segunda guerra mundial con una misión que cumplir en Holanda.

Alto, encorvado de espaldas y desaliñado en el vestir, el recién llegado fue colocando parsimoniosamente sobre el cristal de la ventanilla los objetos que se iba quitando de encima. Depositó en la taquilla del prestamista armenio del barrio bajo de Singapur un reloj pulsera, un encendedor, una pulsera de plata y una estilográfica “torpedo”.

Otra muestra más de la genialidad de Pedro Víctor Debrigode Dugi (en este caso bajo el seudónimo de P. V. Debrigode), que fue publicada por Ediciones Lux aproximadamente en 1948. La colección propiamente dicha consta de 10 novelas en formato de 19 x 13 y a doble columna (según usos de la época) y con ilustraciones de Eugenio Giner (creo). No obstante, de este personaje (Ross Maloney) aparecieron un total de diecisiete novelas (que sepamos). Pues además de las diez aparecidas en esta colección, se habían publicado años antes –en 1944– otras seis dentro de la colección Superhombres, siendo Ross Maloney inseparable compañero de Red Colt, 'El ametrallador' –números 1,4,6,8,10 y 14 de la colección Superhombres–. Y posteriormente, en noviembre de 1952, dentro de la colección Servicio Secreto, apareció el nº 123, “Tres en el infierno”, en la que uno de los tres es Ross Maloney, al del que se hace referencia en alguna ocasión a su sobrenombre de 'Capitán Pantera', esta vez como espía norteamericano en plena segunda guerra mundial con una misión que cumplir en Holanda.

Red Colt, alias 'el ametrallador'. Este personaje apareció en seis números publicados por la Ed. Bruguera entre enero y abril de 1945, aproximadamente, dentro de la colección 'Superhombres', de 16 números, en formato 'bolsilibro' (15x11 cm.), donde se contaban las aventuras de cuatro personajes diferentes: Red Colt, el Ametrallador (números 1,4,6,8,10 y 14); El Fantasma (números 2,5,9 y 13); El Espectro (números 3,7,11 y 15); y Doctor Niebla (los 2 restantes, 12 y 16), aunque sólo los dos primeros fueron escritos por P. V. Debrigode Dugi, nombre con el que las firmó. Red Colt tiene como gran amigo y compañero a un personaje ya conocido aquí en el foro, Ross Maloney --, que ya no es el imberbe jovenzuelo de el 'Capitán Pantera', sino que ahora ya está en plena madurez -aquí tiene 40 años-. Con estas seis novelas, que se añaden a las 10 de 'Capitán Pantera' y el nº 123 de Servicio Secreto ('Tres en el infierno') se completan ya subidas en exclusiva a este foro todas las novelas en las que aparece este personaje de las que tengamos noticia (si alguien sabe de alguna novela más, por favor que lo diga, intentaríamos localizarla de inmediato). Red Colt se encuentra de luna de miel en los USA y ve cómo su reciente y muy amada esposa cae acribillada al ser alcanzada por el fuego cruzado de dos bandas de gángsters rivales. A partir de ese momento, su único propósito en la vida será vengar la muerte de su esposa matando a todos los gángsters de los que tenga noticia. Cometieron una errata. Le cambiaron el nombre al autor, en esta novela le llamaron P.B. Debrigode Dugi cuando era Arnaldo Visconti.