Ciertos crímenes se resisten a permanecer ocultos. El caso de Thelma Joyce fue declarado concluso oficialmente; su esposo Stephen fue declarado absuelto de haberla asesinado, por doce hombres buenos y veraces. Sin embargo, la oportunidad existió y el motivo había sido poderosísimo. Por lo tanto y a pesar de su vindicación nominal, demasiadas personas persistían en creerle culpable hasta tanto que su inocencia quedase probada y sin la menor sombra de una duda. Así pues, y con el fin de que esas sospechas quedasen confirmadas o desapareciesen por completo y para siempre, seis amigos de Stephen resolvieron contratar al detective ciego Patrick Laing, para que llevase a cabo una investigación privada en la misteriosa y confusa muerte de Thelma Joyce.

El psicólogo ciego Patrick Laing se ve obligado de nuevo a poner en práctica sus teorías. La Universidad donde enseña se ve afectada por la oposición del científico Eric Fordyce a las ambiciones teatrales de su hijo. A esto se une el trabajo misterioso que este profesor desarrolla secretamente en su laboratorio en el que parece que está involucrado el gobierno. La situación estalla cuando tras un fuerte enfrentamiento entre Fordyce y su hijo por su participación en una obra teatral, este desaparece y sospechosamente, casi al mismo tiempo se produce un incendio en el laboratorio con consecuencias funestas. Patrick Laing, con su maravillosa intuición, inmediatamente se dio cuenta de que algo trágico se estaba moviendo bajo estos incidentes aleatorios.

Un jurado que ha declarado culpable a un acusado de asesinato por lo que ha sido ejecutado se reúne todos los años en el aniversario de su decisión; en todas las ocasiones en la reunión aparece la viuda para recriminar a los miembros del jurado el haber condenado a un inocente. Para la última reunión se invita a Patrick Laing, profesor asistente de psicología anormal y criminólogo para hablar a los miembros del jurado, que acompaña a la hija de uno de los componentes del jurado que ha fallecido y a la que también se invita a asistir. Aunque la reunión se lleva a cabo en una cabaña de montaña difícil de encontrar, sin embargo acuden a la cita la viuda y el abogado del hombre ejecutado que es portador de unas noticias sorprendentes que tendrán unas repercusiones insospechadas.